Diario del ViñaRock 2011

Con la descarga musical hospedada en mi cabeza, los huesos calados por la lluvia,  el recuerdo del kalimotxo en el paladar, y la sonrisa, por lo vivido, dibujada en mi cara,  me empapo de la música de mi mp3 y me dispongo a resumir, dentro de mis limitaciones, lo que hemos vivido en el Viñarock 2011. Salimos con la auto-caravana a las 6 de la mañana de Vic, (Barcelona), con mucha ilusión,  poca comida , y sueño, aunque los nervios no te dejen volverte a dormir.  Después de 9 horas de viaje, sin tocar una autopista, llegamos a Villarrobledo. El pueblo nos recibió con muchas nubes y poca benemérita, però el bullicio de siempre pronosticaba otro magnífico festival.  Los colegas nos esperaban con las tiendas y los toldos tirados en los jardines de los adosados,  acertaron con el sitio, así da gusto!!  (en Villarrobledo se puede acampar, siempre que se sea respetuoso, en cualquier sitio que creas oportuno). Es bueno llegar un poco temprano, antes de comer, ya que el  sitio que escojas para acampar influirá en parte en todo lo que viene de festival, los vecinos para tener buen rollo, los árboles u otros elementos para poder atar los toldos… Habiendo engullido nuestra primera comida, siempre la primera debe ser abundante, no sabes cuando volverás a pensar en comer,  y habiéndonos equipado para la lluvia, ( los que habían traído ropa y botas para ello, siempre hay quien viene mejor preparado que otros, y eso que todos sabíamos que iba  a llover…), nos decidimos a entrar. En la entrada nos empaquetaron las pulseras del 2009, sí, sí, las del 2009, recortes presupuestarios. Con las pulseras en nuestro haber nos adentramos a recibir la primera descarga musical con todo el cuerpo en una alegría inmensa por volver a cruzar las puertas del Viñarock, y por la curiosidad de no saber que nos depararían estos tres días siguientes. Primer round, Lendakaris muertos, con su potente directo nos hizo saltar bajo la lluvia y cantar sus letras más ácidas. Sin tiempo a recuperarnos del primer golpe musical.....HAMLET, escenario de metal, musicalmente rozando la perfección, a golpe de guitarras y berreos de Molly, dejo de llover y nos catapultó al cielo del metal. Llegó el momento de asimilar las sensaciones vividas, kalimotxearnos y situarnos para ver a Albert Plà. Albert, puro subrealismo, abrió con el día de la bestia y cerró con Ventegenarios, sin palabras, magnífico el catalán. Al terminar Albert Plà, dimos toda la vuelta para subir al escenario de rap, toda la vida se ha podido subir directamente por la colina, este año la han vallado, punto negativo. La colina, aunque a los organizadores les de igual, para los festivaleros formaba parte del festival, de risas, de historietas.  Una vez en el escenario Babilonia, el Tote empezó su recital bien resguardado por su hermano el Shota, letras inteligentes y las bases de DJ Randy, conciertazo!! El viernes Ill Niño como última descarga, bailamos hasta enloquecer con la Pegatina, una vuelta por la rave y a descansar para esperar al sábado con las energías cargadas.   Cuesta irse a dormir cuando aún sabes que te quedan tres días por delante, pensando en qué puede pasar mientras duermes?, no me gustaría perdérmelo. Además, que momentos se viven cuando llega uno cansado y satisfecho a las tiendas, dónde siempre hay alguien esperando, y a esas horas de la mañana, sin haber dormido, lo único que se pueden decirse son chorradas, barbaridades y tonterías que hacen que te partes de risa y el cansancio no te deje parar. Los que estuvieron allí me entenderán. Pero finalmente te vas a descansar porque sabes que mañana habrá más. El sábado a las 12 en pie, café, sandwich y kalimotxo ( desayuno de menú ). Si eres de los que necesitan disponer de un aseo en condiciones, recomendamos acercarse al bar, donde puedes disfrutar de un buen café y una puesta a punto. El cielo con su capa negra formada por nubes, amenazaba lluvia, pero nos armamos de valor y a las 17:30 estábamos en primera línea de fuego, con nuestra alma empapada y reventando nuestras gargantas cantando cada una de las canciones de Transfer, rock de la calle con letras dictadas por el corazón, de lo mejorcito del Viñarock. Saboreando el final del conciertazo de Transfer, nos fuimos a centrifugarnos con unas cuantas canciones de Kop, siempre Antifascista, y directitos a las tienda a cambiarnos ya que la lluvia había llegado a rincones desconocidos de nuestro cuerpo.

Volvemos a entrar con Gatillazo, donde vimos medio concierto en la carpa del metal, a causa de la lluvia enrabietada que acontecía, pero fue compensado, con creces, por Evaristo escupiendo con rabia cada una de sus letras antisistema. Nos dejamos caer a ver The Locos, bailamos Ska y pudimos ver al “Pipi” tirándose a la estatua de la libertad, fuck USA!!. Sin tiempo para pensar nos metimos en el plato fuerte de la noche, posiblemente del festival, con todos ustedes…..S.A, con una de las mejores, por no decir la mejor, bateria del panorama nacional. Nos fulminó con una descarga, hardcore, metal, trash, que nos abrió la mente y nos hizo descargar toda nuestra rabia en contra de la injusticia social. Para terminar, del sábado destacar las clones, las versiones de Platero y Rage Against the Machine, correctísimas las 2. Algunos destacaríamos a kid koala y la música electrónica de la carpa contigua, pa gustos colores!. Sin ganas de la vuelta de rigor por las raves a la auto a descansar y mañana más. El domingo a las 12 en pié, café, sándwich y kalimotxo ( os suena?? ). El cielo nos había dado una tregua y decidimos ir a disfrutar del conciertazo que se marcaron los chikos del maíz. Con un problemilla en los platos incluido, pero que lo resolvió el “Mega” currándose el tema a capela. Rap combativo, letras directas, red power!! De lo mejorcito que ha dado Valencia!! Que viva la mazorca!                 Un vez rapeado con los chikos, vuelta al campamento base para llenar nuestro ser con el líquido elemento, descansar de tanto sol, clima extremo, y prepararnos para ver a Hora Zulú. Los granadinos nos hicieron saltar como nunca, juntamos a toda nuestra gente, no faltaba nadie, hasta el momento había sido imposible. Todos saltábamos enloquecidos, llevados por los rift de Paco Luke, como chamanes en pleno trance. Cabe destacar que este fue unos de mis mejores momentos del festival, cuando consigues que todos estén en el mismo concierto, en el mismo sitio, disfrutando de la música, nadie está perdido, lo miras desde fuera y te das cuenta de la suerte que tienes de que sean esos tus compañeros de festival, amigos o tu pareja inseparable, es un momento efímero ya que cuando se termine el concierto se van a dispersar seguro, pero es un momento lleno de magia. Después del subidón, nuestros cuerpos necesitaban gasolina, nos comimos una hamburguesa viendo a Txarrena, y la empujamos con más kalimotxo. Lo bueno de estos festivales es que si tienes hambre puedes comer, si tienes sed puedes beber, si tienes frío te puedes comprar una sudadera por 7 euros, si necesitas dinero tienes un cajero, si necesitas ir al servicio también los tienes, que quieres una fuente de agua, también,  y si quieres buena música también la tienes, que más se puede pedir? Para ir terminando y saboreando el festival, nos aflamencamos con los delinqüentes y ganamos nuestra última batalla musical de la mano de Boikot. Salud y Libertad!! Quiero mencionar la gran labor hecha por Tokame la polla, al recordarnos, de una forma tan fiel, el gran grupo que fue, y sigue siendo en nuestro corazón, La polla records. Espero que estas líneas os hayan ayudado a recordar las sensaciones vividas a los que fueron, y a los que no pudieron ir, os haya acercado un poco a este festival tan maravilloso. Para terminar, me gustaría agradecer a los vecinos, tanto de acampada, como a los del pueblo, toda la alegría y el apoyo que han aportado a nuestras vidas, y decirles que les llevaremos siempre en nuestro corazón.